El Pepe haciendo de padrino y presentador de dos
voces jóvenes, allí por el 86: Quique Ojeda y Eduardo Borda. Incluso, los dos
artistas, estuvieron junto al pianista un tiempo considerable, hasta que Basso
decide formar un trío para actuar en lugares reducidos.
En 1985, José estaba a pleno con su orquesta; y
justo ese año recibe el Premio Konex - Diploma al Mérito en la disciplina mejor
director de orquesta típica. Por ello, la gente de la grabadora le pide que
vuelva a grabar con su orquesta antes de disolverla. Un trabajo que lleva más
de seis meses de trabajo, tiempo en que
Basso propone las voces de Ojeda y Borda para abordar los cantables, como se
solía decir.
Ese LP, casi despedida del querido Pergaminense,
es el que dejamos aquí. Y aunque es algo nuevo el trabajo, es uno de los
difíciles de nuestra música popular.
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