Las anécdotas de las andanzas de Cobián ya son más que conocidas. Pero, lo que pocos saben, es que seco y partido en dos, siempre fue un taita de la vida. Él era un Dandy, un tipo capaz de sacar de la nada, todo.
La buena vida y las mujeres fueron un objetivo no negociable en su vida. Podía dejar cualquier cosa, menos su elegancia y perfil de tipo de la noche. De esos, que le sobra calle, experiencia y que vivió todo a mil kilómetros por hora.
La música fue un medio más de llegar y sostenerse en la noche, esa noche que le dio la templanza espiritual para llegar a ser uno de los individuos imposibles de olvidar a la hora de escribir la gran historia de nuestro tango.
Soberbio como músico y director, impuso en el tango una renovación en la entrega, solo comparable con Piazzolla, De Caro o Pugliese.
Algunas versiones de su orquesta que pondremos aquí, certifican lo que se escribe.
Disfrútelo, es muy bueno.
2 comentarios:
Felicitaciones por todo este material... A veces los que ingresamos no somos agradecidos por el trabajo que hace gente como vos... Gracias por tanta música compartida.
Mario
Puerto Deseado, Santa Cruz, Argentina
Gracias estimado patagónico...
No sabés lo bello que es encontrar un saludo o un agradecimiento como comentario.
Un abrazo grande y a tu disposición para lo que gustes.
Alemán56
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