El LP de Sosa que vendió millones de placas por culpa de dos
tangos: Camouflage y Al mundo le falta un tornillo. No se puede creer, se vendía a un promedio de doscientos discos
por día cuando salió, supo contarme Luis Padilla ex dueño de La Disquera en
Ramos Mejía. Él –por Sosa- vendía más que los ídolos de la juventud con su chengue chengue en esos momentos. Tal es así, que cuando rematé el sobrante en 1987, descubrí
una caja con doscientos cincuenta discos. No se podía creer. Luisito, era
fanático de Julio; y en su casa de ciudad de Neuquén tenía toda la colección y
una gran cantidad de publicidades impresas de las actuaciones de Sosa y de
carteles de publicidad de los discos. Siempre en la meza de café, el Muñeco
Ordoñez lo cargaba diciéndole: “Vos
porque boicoteabas mis disco, pero yo y Leo Marini éramos más vendedores que
Sosa y todos juntos”, cerrando con una gran carcajada ante el sonrojo de
bronca de Padillita.
1 comentarios:
Aleman 56, la suerte no me ayuda en el día de hoy debido a que este figura como no válido, por favor actualizar el link.
Cordialmente
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