Pages

¿Qué Tal si deja un comentario?

Estimados lectores...


Debido la pandemia que nos está acorralando en nuestros hogares, para diesmar su efecto, hemos decidido poner uno o dos posteos diarios, aunque más no sea, para tratar de hacer pasar un buen rato, en medio del factible aburrimiento de estar en casa las 24 horas.
La idea es que el hecho de bajar y ponerse a escuchar el disco, nos de la posibilidad de pasarla lo mejor posible.
Solo pido un favor, sea del país que sea el lector que llegue: "No salga, cumpla con el pedido de cada gobierno y respete las reglas para salir de ésta pandemia"
Gracias y disfruten de nuestro Tango.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Injusto, cruel y desolador

17 de junio de 2010



Siempre la muerte es injusta, cruel y desoladora.
Injusta, porque el Gringo, Titi o como quieran decirle o recordarlo, había logrado lo que soñó por años, por lo que se mató laburando y aprendiendo.
Cruel, porque debe dejar los chicos –que amaba- a su mujer, sus padres, amigos y oyentes quebrados emocionalmente y con la angustia brutal de verlo sufrir tanto tiempo a merced de una enfermedad que lo postró y ni siquiera le permitió morir como lo hubiera deseado: Transmitiendo una carrera.
Desoladora, porque los que lo vimos nacer en esta profesión, sabemos qué era la misma para él y sus sueños. Porque deja inutilizada cualquier terminología que pudiere ser oportuna para hablar de su persona y personalidad.
Porque fue un tipo bueno, y digo bueno, en todo el sentido de la palabra.
Un profesional que logró llegar al lugar que soñaba: Carburando.
Y fue tan buen tipo, que en medio de una picadora de carne como son los medios porteños, él logró unir al grupo en derredor de su figura, corriendo la línea de envidias y odios, al punto de lograr ser cabeza, pero también compañero.
Nunca supe, conocí o me anoticiaron de alguna canallada. Era incapaz de hacer semejante cosa.
Todavía en su garganta quedaba el polvo, la tierra de los circuitos de la región que lo vio transitar en el aprendizaje del relato.
Allí quedamos nosotros ahora, desolados y mirando incrédulos. Allí con la cabeza gacha estarán el Gallego Fernández, El gringo Héctor Pagano, Dany Cingolani, Carlitos Tripichio, yo y miles más.
Tal vez lejos nuestro, la inminencia de muerte le permitió saber que los que lo quisimos, lo seguiremos haciendo.
Tal vez su mujer sepa ahora, que cada casa de Venado Tuerto y la región, esté postrada en un rezo por su alma y un mejor destino para ella y sus hijos.Nadie podrá devolvernos su gesto tímido y simple.
Nada, absolutamente nadie, podrá darnos un consuelo válido, fácil de explicar y de aceptar.
Ante todo esto: ¿Qué decir?
Que también con algunos de nosotros, la muerte fue injusta, cruel y desoladora.
No hace muchos días El Negro Rubén Juárez y ahora, el Gringo Camps.
La muerte, no es justa. Es terminante.
Y terminó con un tipo tan bueno y justo, que por ello no hay palabras claras, ni análisis serios para poder decir lo que debiéramos.
Seguro estará junto a Dios, de pura charla con aquellos que lamentaba no haber conocido y que fueron los gestores de una historia maravillosa en el Turismo Carretera.
Allá gringo, me han contado que el tiempo no pasa. Así que, podrás cansarte de charlar y aprender más.
Mi mejor recuerdo para vos.
Gracias por haber pasado por la vera de mi vida.
Chau Gringo y hasta cuando gustes encontrarme.


El alemán.

0 comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué Tal si deja un comentario?